(XALAPA, MÉXICO). Me he despertado en el estar siendo. Los otros que son yo no me encuentran. El yo que sois todos me deja de lado. Se han poblado de kilómetros las distancias. Y afuera sigue la lluvia. Atroz. Interminable. No me encuentro donde me busco: llegar a ser lo que soy. Un nadie con preocupaciones. Viajar en dirección a un sueño. Devenir sin tiempo. Y pre-ocupado. Donde vivo, crezco. En un puñado de personas con acento. Hoy tengo todas las edades a la vez. Y ninguna al mismo tiempo. Miro el silencio de una noche de luna. Ni siquiera es casual que el horizonte sólo me parezca alcanzable cuando estoy parado. Es la verdad de las cosas finitas. Ni rompo las últimas nubes. Ni soy una mujer violada. Ni esta es una sonata triste de verano. Ni tú ni yo. Mis palabras no son nada.