El periodismo feminista es crítico por definición, transgresor por intuición, doloroso por contexto y cuidadoso por decisión. Complejo y autocrítico, molesto hasta para quien lo ejerce. Quiebra los cánones de la profesión dados por infranqueables.

mundo desplazados.orgPikara Magazine, un retablo de dudas entre la consolidación y la creación
(Dígitos, 25-07-24)